sábado, 1 de marzo de 2014

Bordadores afinaron ayer los trajes del Carnaval de Oruro



“Todo listo, estamos preparando la última entrega de los trajes”, fue el anuncio de los cerca de 80 bordadores que trabajaron por más de tres meses y en algunos casos seis, para elaborar los trajes de morenos, diablos, caporales, tobas y otras danzas que se lucirán en la entrada de hoy.

“Las 24 horas para nosotros fueron de 48 horas, pero valió la pena, todo por la mamita del Socavón”, manifestaron hombres y mujeres cuyo arte aporta a la cultura del Carnaval de Oruro.

En cada uno de los talleres hasta ayer por la mañana, los artesanos daban las últimas puntadas a detalles que hacen a la belleza del traje. “Estamos colocando los últimos adornos al traje de Lucifer y figuras de la Ferrari, los Mañasos y la Morenada Central”, comentó Miguel Calipampa, sin levantar la cabeza del traje que terminaba.

“Hoy (ayer) entrego el último traje de pecados, que es la Avaricia. Los seis restantes ya se los han llevado. Su dueño va a llegar del interior, así como los trajes de Satanás, Lucifer, chinas... todo nuevo, además de las caretas”, dijo el propietario de Bordados Ríos, Édgar Ríos, que en unos cuatro meses ha logrado elaborar al menos 150 trajes.

Virginia Baltazar, de Bordados El Dorado, señaló que no todos los atuendos que se elaboran son nuevos. Algunos son restaurados, como los “turrilitos” de la morenada. “Algunas veces casi no se duerme, pero cuando se acaba, se siente una satisfacción grande y mucho más cuando el traje es utilizado en la Entrada del Carnaval”.

El vicepresidente de la Asociación de Bordadores Arte Nativo Oruro, Fernando Llave, destacó la labor de sus afiliados, que se han entregado al proceso de acabado de los miles de trajes que elaboran desde agosto, octubre y noviembre; “todo ya está listo para que los bailarines estrenen sus trajes en la entrada de mañana”, dijo.

Comentó que toda la jornada de ayer los bordadores se encargaron de entregar los trajes. Eso ocurrió hasta cerca de la medianoche, aunque algunos bailarines llegan al filo de la hora a recoger su ropa. “Hay clientes, en especial los del interior, que no pueden llegar día antes de la entrada, sino minutos antes del recorrido”, afirmó.

Ruth Ríos, de Bordados Bolivia, narró que el recoger trajes del Carnaval es toda una ceremonia. “Los conjuntos recogen con una ch’alla y al mismo tiempo entregando el costo del alquiler de la ropa y una t’inka (consistente en vino y comida) a los artesanos, es un agradecimiento a la Pachamama y a la Virgen del Socavón”, indicó.

Clientes entraban y salían con prisa de Diseños Mónica, taller que elabora trajes para diferentes especialidades. “Por ser un trabajo artesanal, hay detalles que se deben pulir para que todo esté a la perfección”, puntualizó Mónica Siles, la propietaria. “Trabajamos más para las mujeres, pero este año hemos elaborado trajes para una fila de los ‘ñaupa diablos’ (antiguos) de la diablada Urus, y ponemos todo de nuestro trabajo profesional, de modo que el cliente esté satisfecho”.

Los trajes de la calle La Paz se alquilan por Bs 350, 400, 500, 600 y 800, según la cantidad de elementos (careta, botas) que requiera el cliente, y si el traje es nuevo o restaurado.

La entrada folklórica

Bailarines

Según la Asociación de Conjuntos Folklóricos, se espera a 35.000 bailarines y 10.000 músicos.

Recorrido

Son 4 kilómetros desde la calle Aroma, por la avenida Cívica y hasta el Santuario del Socavón.


No hay comentarios:

Publicar un comentario